Intento de criminalización de la sociedad civil organizada que exige derechos sociales fundamentales como una vivienda digna.
Ausencia de un dispositivo humanitario.
Ausencia de soluciones habitacionales reales para las personas afectas.
Viernes, 3 de febrero de 2023.
Desde la Plataforma Derecho a Techo condenamos tajantemente las actuaciones de la alcaldía de Níjar (PSOE) en relación al desalojo y derribo del asentamiento de El Walili y señalamos la gravedad de los hechos ocurridos.
Hechos
El lunes 30 de enero fue derribado el asentamiento de El Walili (Níjar) por orden judicial -se interpuso un recurso que fue desestimado el jueves 26 de enero-.
A primera hora de la mañana había aún muchas personas dentro de sus hogares. Según estimación 250 personas, aproximadamente la mitad de las que residían en el asentamiento habitualmente. Las demás, hasta las casi 500, habrían huido en los días previos. Buena parte de las que aún se encontraban en El Walili tenían todavía las viviendas dispuestas con sus enseres ante la imposibilidad de trasladarlos a otros alojamientos alternativos.
Sobre las 8:00 de la mañana se produjo un incendio que fue extinguido. Sobre las 8:30 se produjo un segundo incendio, más grande, que provocó la salida del interior de las viviendas de las personas residentes, de la prensa y de las personas de la Plataforma Derecho a Techo que en ese momento estábamos congregadas en la zona central del asentamiento. La causa de estos incendios, que pudieron ser intencionados, no se podrá determinar, ya que se acometió el derribo acto seguido. No obstante, la policía y los bomberos, que se encontraban muy cerca del lugar del fuego en el momento en que se originó, pudieron controlarlo sin dificultad. Tras cortarse la electricidad y tener a las personas afectadas en la carretera con los escasos enseres personales que pudieron recoger en el momento, se acometió sobre las 9.30, el derribo con dos palas retroexcavadoras, que se alargó hasta las 13.30.
En el derribo, fueron demolidas también una zona de cortijos preexistentes al asentamiento y una mezquita en perfectas condiciones estructurales. No se realizó un examen exhaustivo de las viviendas para saber si todas las personas habían salido de allí. A pesar del trabajo de rescate por parte de voluntarias ajenas al ayuntamiento en los días previos, gran parte del alrededor de 80 animales que vivían en el asentamiento se abandonaron en el interior. El responsable de la protectora de Pechina, que se ocupa de ellos, por su parte, pudo sacar a cinco.
Sobre las 10:30 llegó el primer autobús dispuesto por el Ayuntamiento de Níjar, con una trabajadora social y una traductora, que en ningún momento explicaron la finalidad del mismo, por lo que la gente tardó bastante tiempo en subir al transporte. Una hora más tarde, como consecuencia de la lluvia, se fueron dispersando las personas afectadas, algunas de las cuales se subieron a los tres autobuses que mandó el consistorio municipal.
En total, según datos de las entidades sociales implicadas, llegaron 80 personas al Dispositivo de Acogida Temporal instalado en el paraje de Los Grillos, en el Centro de Día de la Fundación Cepaim/Almería Acoge, y en una nave contigua con literas en fila donde también los recibieron Médicos del Mundo y Cruz Roja. Según información de Servicios Sociales, se trata de un dispositivo para una estancia máxima de 2 meses. De las 80 personas recibidas, únicamente permanecieron 30, según las mismas fuentes consultadas al finalizar la jornada.
Las personas afectadas mostraron en reiteradas ocasiones que no querían abandonar sus chabolas, pese a que las condiciones no fueran las adecuadas para una vida digna, ya que al menos estas les permitían estar cerca de sus puestos de trabajo y de su red de apoyo. Asimismo, expresaron la necesidad de que no fueran destruidas las chabolas en plena ola de frío. Pese a esto, en estos días, el Ayuntamiento ha comenzado a abrir zanjas en el solar de El Walili, donde está enterrando todos los escombros que allí quedaron.
Por su parte, las personas afectadas que continuaron en el centro de emergencia temporal, no han sido informadas sobe ningún itinerario personalizado a seguir. La mayoría de ellas han preferido abandonar el recurso y construir una nueva chabola en otros asentamientos.
Valoración
- Los hechos ocurridos en El Walili son de extrema gravedad y la administración local en manos de Esperanza Pérez Felices (PSOE) es responsable de ellos.
- Ausencia de un dispositivo humanitario e informativo en El Walili para las personas afectadas. Tan solo hubo un dispositivo policial para realizar el derribo y desalojo. Ninguna entidad social fue contratada por el Ayuntamiento, ni Servicios Sociales se personó para atender a las personas afectadas.
- Ausencia de medidas preventivas. La administración local del PSOE no realizó un trabajo previo adecuado para trasladar a las personas afectadas y sus pertenencias, tampoco les informó de posibilidades habitacionales, por tanto muchas de ellas, además bajo la lluvia, fueran testigos del derribo de sus hogares.
- Hasta la fecha, persiste la ausencia de soluciones habitacionales reales para las personas afectadas más allá del dispositivo de emergencia, que está concebido para dos meses. Además, este dispositivo, que consiste en una nave con literas, en las que no hay intimidad, está lejos de ser un hogar. La alcaldesa de Níjar no ha puesto en ningún momento a las personas trabajadoras del campo y sus derechos en el centro de una política local de vivienda, ni en el de ninguna iniciativa de solución habitacional.
- “Solipsismo político” de la alcaldesa de Níjar Esperanza Pérez para cualquier negociación con el resto de agentes del territorio. El gobierno del consistorio de Níjar, con Esperanza Pérez Felices al frente (PSOE), ha realizado este plan atendiendo a intereses económicos de la patronal agrícola COEXPHAL, desoyendo la solicitud del resto de agentes del territorio -desde el Obispado de Almería, la Plataforma Derecho a Techo, hasta un centenar de organizaciones locales, pero también nacionales e internacionales- que de manera reiterada le habían solicitado por escrito un aplazamiento del plan de derribo.
- Abuso de poder, electoralismo, dinámicas de intereses creados y “política cortijera” del PSOE de Níjar. La mayoría absoluta del PSOE en Níjar no puede ser excusa para la ejecución del monopolio de la violencia institucional contra las personas más vulnerables que habitan en el municipio. La campaña por ganar las municipales al partido de extrema derecha Vox, el más votado en las elecciones autonómicas pasadas en el municipio, no puede suponer una deriva política del PSOE hasta extremos que atenten contra los valores democráticos y las normas de derechos humanos. Los hechos tan graves ocurridos en El Walili han sido posibles con la colaboración de entidades sociales locales que se hallan más o menos involucradas en la red clientelar del Ayuntamiento de Níjar y el lobby patronal agrícola.
- Intento de criminalización de la sociedad civil organizada que exige derechos sociales fundamentales como una vivienda digna. Es muy grave que en una sociedad democrática como la española se criminalice el derecho a la protesta pacífica y la defensa de los derechos humanos y sociales. Se ha abierto un atestado contra la Plataforma Derecho a Techo con ocasión del fuego originado. Esperanza Pérez Felices (PSOE) ha declarado continuamente que se ha tenido «un realojo en paz pese a los intentos de algunos por convertirlo en tragedia con incendios provocados o intimidación a los moradores para que no subiesen a los autobuses”. Afirmaciones como estas son radicalmente falsas, de hecho, desde la Plataforma se ayuda a poner las pertenencias en los autobuses de los moradores de El Walili, ante la dejadez de funciones de la administración local. Igualmente, nos gustaría saber el origen del fuego, aunque creemos que será muy difícil dado que se han destruido todas las pruebas del mismo.
- Cinismo político y uso del “discurso de los derechos humanos” para ejercer el monopolio de la violencia institucional al servicio de intereses económicos. En el comunicado del Ayuntamiento se puede leer que “ha sido la mayor muestra de compromiso con la defensa de los derechos humanos que hemos visto en Almería en muchos, muchísimos años”. Nos parece lamentable que se pueda utilizar un discurso así para hablar de una violación de los mismos. Desde el punto de vista ético y moral es denigrante.
- Falta de debida diligencia en el protocolo contra el maltrato animal. No se aplicó correctamente, no se recogieron animales en los días previos y han quedado bajo los escombros a muchos de ellos, fundamentalmente gatos. Se infringe la ley.
- Falta de diligencia en el protocolo de residuos peligrosos. Se está procediendo al entierro de basura sin clasificar, con restos de amianto, en fosas excavadas en el solar de El Walili. Se infringe la ley.
- Derribo de patrimonio histórico y cultural. Se ha derribado un cortijo antiguo preexistente al asentamiento y una mezquita de obra en perfectas condiciones.
Exigencias
- Depuración de responsabilidades políticas por las actuaciones llevadas a cabo en el derribo de El Walili.
- A las entidades sociales que colaboran con el Ayuntamiento de Níjar, que dejen de colaborar con una administración que vulnera los derechos humanos de las personas trabajadoras del campo.
- Transporte desde el alojamiento temporal hasta los puestos de trabajo de las personas que han seguido en el recurso para evitar la pérdida de empleos.
- Alternativas habitacionales estables a las personas afectadas de El Walili que han presentado la documentación por Registro en el Ayuntamiento de Níjar.
- Elaboración Plan de Vivienda Pública para el Municipio de Níjar con enfoque de derechos humanos, que ponga a las personas en el centro de las soluciones. Que sea participativo mediante una mesa de dialogo vinculante con los agentes que estamos presentes en el territorio y las personas directamente afectadas.
- Al Gobierno de España, que firme y ratifique la Convención Internacional sobre la Protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y sus familias. También, que garantice el cumplimiento de los Derechos Humanos en todo el Estado, incluidas las actuaciones de las administraciones locales, según lo establecido por los pactos internacionales con los que ya se ha comprometido.
Agradecimientos
–A las organizaciones sociales, de derechos humanos, políticas, religiosas y sindicales que han apoyado con la firma del manifiesto de la Plataforma Derecho a Techo la reivindicación de que no debía haber desalojo sin realojo. Queremos seguir tejiendo alianzas. Os instamos a realizar informes para esclarecer los hechos. También solicitamos ayuda jurídica ante la posibilidad de emprender medidas legales por los sucesos acaecidos en El Walili.
–A los sindicatos SOC/SAT y CGT, que a partir de estos hechos han comenzado a trabajar para convocar una huelga general de trabajadores/as del campo que ponga en el centro de la negociación con la patronal agrícola COEXPHAL la necesidad urgente de blindar derechos y mejorar condiciones de vida para las personas que hacen posible “el milagro económico almeriense” y nos alimentan todos los días con su trabajo.
–A la prensa y los medios de comunicación que han cubierto la noticia del desalojo de El Walili con su amplia variedad de opiniones y sensibilidades. Muy particularmente a aquellos que fueron testigos in situ de los acontecimientos que se produjeron el pasado 30 de enero. Os instamos a seguir ejerciendo vuestro trabajo y dar a conocer a la sociedad española e internacional lo que sucede en el campo de Níjar.
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