El presidente de los empresarios onubenses reclama a la Junta una «actualización» del sistema que regula el derecho al subsidio agrario.
La patronal Asaja lamenta que apenas 200 personas hayan mostrado interés en las 10.000 ofertas de empleo gestionadas por el SAE.
8.829 personas están inscritas como demandantes de empleo agrícola de Huelva.
La oferta se ha vuelto a cursar la través de la fallida plataforma GEA, que en Huelva cuenta con sólo 560 usuarios.
La oferta salarial para peones agrícolas en la provincia de Huelva fluctúa entre el 85,99 % y el 96,43 % del SMI, que sólo es superado, en un 2,44 %, por la categoría de encargado de las explotaciones.
La oferta para las 19.000 mujeres marroquíes contratadas en origen incluye gastos de desplazamiento a España y alojamiento a cuenta del empresariado.
«Si tan malo fuera el Convenio del Campo, Huelva no gozaría de paz social», asegura García Palacios.
Huelva, 6 de noviembre de 2019. «Resulta penoso que no se incentive la búsqueda activa de empleo en lugar de promover una sociedad subsidiada». Palabras que recuerdan a exabruptos propios de algún adalid del independentismo catalán al referirse a los trabajadores andaluces, pero que, empero, provienen del presidente de la Federación Onubense de Empresarios (FOE), José Luis García Palacios, a la sazón presidente de la patronal Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) y de la interprofesional Interfresa, (además de presidir la Caja Rural del Sur y la fundación de dicha entidad bancaria).
En declaraciones recogidas este martes por el diario ABC, García Palacios se quejaba de que apenas 200 personas hayan mostrado interés por la oferta pública de hasta 10.000 empleos promovida por el sector onubense de los frutos rojos para la inminente temporada de recolecta. «No es de recibo que los empresarios tengan que buscar mano de obra en el extranjero porque no hay interés en trabajar», aseguraba el presidente de Asaja, quien ha pedido «al nuevo gobierno de la Junta» que revise la normativa que regula el subsidio agrario para llevar a cabo «una actualización». Esta revista ha tratado de recabar mayor concreción sobre la actualización respecto del subsidio que satisfaría las ambiciones de los empresarios onubenses, pero no ha sido posible, ya que «el presidente [García Palacios] se encuentra de viaje».
En cualquier caso, se trata de un avance en la escalada de exigencias del empresariado agrícola de Huelva a las Administraciones Públicas. Ya en abril de este mismo año, el propio presidente de la FOE pedía «medidas” para que los trabajadores no rechacen las ofertas de empleo en el campo onubense, aunque en aquella ocasión no cuestionó, como este martes, la normativa que regula los subsidios a los que tienen derecho los trabajadores del campo.
El GEA, una herramienta (otra vez) fallida
Respecto de los motivos por los que los trabajadores agrícolas onubenses y españoles declinan trabajar en los campos de Hueva, García Palacios rechaza categóricamente cualquier relación con las condiciones laborales o el salario ofrecido, y defiende el Convenio Colectivo del sector frente a las críticas de partidos, sindicatos y asociaciones, que consideran el de Huelva el peor convenio del sector en el conjunto de España. Para García Palacios, y según recogía también ayer ABC, se trata de «un argumento sin recorrido alguno. Si tan malo fuera el convenio del campo, Huelva no gozaría de la paz social que tiene».
Desde la Junta de Andalucía, que gestiona la oferta de los freseros de Huelva a través del Servicio Andaluz de Empleo (SAE), la presunta falta de interés de los trabajadores onubenses (y andaluces) podría, sin embargo, tener otra explicación, más relacionada con la forma en que se ha gestionado. Según ha explicado a esta revista un portavoz autorizado de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo, la oferta, que se destina principalmente a empleos de recolección para los meses de marzo a junio. ya ha sido cerrada y, al igual que se hizo el año pasado, se ha gestionado a través de la Plataforma GEA, una herramienta informática en la que los trabajadores agrícolas pueden darse de alta, de forma voluntaria, para acceder y recibir notificaciones de las diferentes ofertas de empleo en el sector. En el caso de Huelva, GEA cuenta con sólo 560 usuarios inscritos, que son los que han podido recibir alguna notificación de los 10,000 puestos eventuales ofertados a través de esta herramienta digital para la campaña de recolecta de berries.
Fuera de la plataforma GEA, sólo puede encontrarse una oferta de empleo en el sector agrícola onubense a través de la web general del SAE. En concreto, se solicitan, para una empresa también de Almonte, 2 personas para «atención en idioma búlgaro a clientes internos y externos» (sic), a las que se exige, con carácter «imprescindible», dominio demostrable del idioma búlgaro-nativo «y buen nivel en español», formación de Bachiller o equivalente, disponibilidad para viajar y automóvil propio. Asimismo, con carácter «valorable», conocimientos de «ofimática a nivel de usuario». La oferta contempla «contrato temporal a jornada completa de 1 mes prorrogable a indefinido», jornada laboral de seis horas y media librando, «por turnos», un día a la semana, y con un salario (bruto) de 44.14 €/día.
Son las únicas ofertas del sector accesibles a través de la web del SAE. El resto, hasta 10.000, según confirmaba este martes la Junta de Andalucía a La Mar de Onuba, se publicitó exclusivamente (y sólo hasta hace unos días) a través de la plataforma GEA , que en el caso de Huelva, como se apuntaba anteriormente, apenas alcanza los 560 usuarios registrados. Sólo 200 personas, sin que conste si esta cifra se circunscribe únicamente a los usuarios onubenses o al total de inscritos en GEA, mostraron interés por una o más de las propuestas de los empresarios de los frutos rojos.
El fallido uso, por segundo año consecutivo, de la plataforma GEA, va ser objeto de un «estudio profundo» por parte del Delegado de Empleo en Huelva, Antonio Augustín, quien considera necesario extender la oferta de los agricultores onubenses a otros canales de mayor difusión, y quien, según las fuentes consultadas por esta redacción, pretende analizar con todos los agentes implicados, los motivos del escaso interés que la oferta de empleo en el campo onubense despierta en los trabajadores agrícolas. Sólo en la provincia de Huelva, figuran como demandantes de empleo en el sector 8.829 personas.
El salario de los trabajadores eventuales en el sector agrícola onubense, según el convenio de referencia en la provincia de Huelva suscrito entre la patronal ASAJA y el sindicato CCOO, contempla un salario que oscila entre el mínimo de 36.63 € (brutos) por jornada que se paga en la categoría laboral de peón no cualificado, 41,10 € del peón cualificado, y los 43,66 € de la de encargado. Sólo está última categoría supera, en un 2,44 % el Salario Mínimo Interprofesional fijado por el Real Decreto 1462/2018, de 21 de diciembre publicado en el BOE núm. 312 de 27 de diciembre de 2018. El salario para peones cualificados y manijeros es de 41,10 € y 41,38 €, un 3,57 % y 2,81 % por debajo del SMI, respectivamente. En el caso específico de la fresa, sólo los plantadores superan, en un 2,77 %, el SMI. Los recolectores y dedicados a otras faenas se quedan un 1,41 % por debajo.
Rueda de prensa valorando la situación del convenio del campo de Huelva, tras el preacuerdo Asaja CCOO Desde UGT no estamos de acuerdo por no cubrirse las expectativa de los trabajador@s @UGTHuelva @UGT_Andalucia @TALLISCA @UGT_Comunica @mc_castilla @DiarioHuelva pic.twitter.com/TCkSeZ5V1h
— Sebastian Donaire (@sdonaire1964) July 27, 2018
Precisamente ese desfase entre el SMI y el salario recogido en el Convenio Colectivo firmado entre Asaja y CCOO, supuso la ruptura en la tradicional unidad de acción entre las dos principales fuerzas sindicales, ya que UGT se negó a firmar una tabla salarial que no se ajuste al Real Decreto del Gobierno de 21 de diciembre pasado. Su artículo 4, titulado Trabajadores eventuales y temporeros y empleados de hogar, dice, textualmente: "Los trabajadores eventuales y temporeros cuyos servicios a una misma empresa no excedan de ciento veinte días percibirán, conjuntamente con el salario mínimo a que se refiere el artículo 1, la parte proporcional de la retribución de los domingos y festivos, así como de las dos gratificaciones extraordinarias a que, como mínimo, tiene derecho todo trabajador, correspondientes al salario de treinta días en cada una de ellas, sin que la cuantía del salario profesional pueda resultar inferior a 42,62 euros por jornada legal en la actividad". Asimismo, el mismo articulo establece que "en lo que respecta a la retribución de las vacaciones de los trabajadores a que se refiere este artículo, dichos trabajadores percibirán conjuntamente con el salario mínimo interprofesional fijado en el artículo 1, la parte proporcional de este correspondiente a las vacaciones legales mínimas en los supuestos en que no existiera coincidencia entre el periodo de disfrute de las vacaciones y el tiempo de vigencia del contrato. En los demás casos, la retribución del periodo de vacaciones se efectuará de acuerdo con el artículo 38 del texto refundido de la Ley del Estatuto de los Trabajadores y demás normas de aplicación".
Según los cálculos realizados por UGT, lo contenido en el Art. 4 se traduce en un salario mínimo por trabajador y jornada de 45,98 €, pero dicha pretensión fue rechazada "íntegramente" por el Juzgado de lo Social nº 2 de Huelva, al considerar que el acuerdo colectivo firmado en octubre por Asaja-Huelva y CCOO "se ajusta a la legalidad".
Lo cierto es que, con el actual convenio y las tablas salariales vigentes, el sector onubense de los frutos rojos no logra atraer mano de obra española. Así, la próxima temporada, cuyo comienzo se adelantará este año al mes de diciembre a consecuencia del Cambio Climático, precisará de una cifra cercana a los 90.000 trabajadores. Si no hay bajas de última hora (en la anterior campaña casi 5.000 declinaron venir a España en el último momento), 19.000 serán mujeres contratadas en origen en Marruecos y otros países africanos, y su traslado hasta Huelva y alojamiento serán sufragados por los empresarios. Una gran mayoría de puestos se cubrirán con trabajadoras y trabajadores europeos procedentes de países del este (Rumanía, Bulgaria y Polonia, principalmente), ciudadanos europeos cuyos estados aún no han adoptado el euro como moneda común. Muchos de ellos, residentes en España, repetirán campaña y serán contratados directamente por las empresas, sin intermediación de la Administración Pública, y según las condiciones del convenio colectivo del campo. Centenares de ellos, de piel negra sobre todo, procedentes de Senegal, Mali, Costa de Marfil... llegarán a Huelva al llamado de la extensa demanda de mano de obra, y se alojarán durante esos meses de trabajo en los muchos asentamientos chabolistas de jornaleros sin hogar diseminados por las localidades donde se ubican las explotaciones agrícolas.
«No hay interés por ser explotado» – indicó García palacios en un arrebato de realidad y decencia