¿Puede perder Doñana el estatus de Patrimonio de la Humanidad?

Fondo de laguna seca en la Cañada de Los Pájaros en el entorno del Parque Nacional de Doñana (Imagen: Antonio Jordán, Universidad de Sevilla)

La Unesco estudia incluir el espacio en la lista de Patrimonio de la Humanidad «en peligro».

Según adelanta Climática (La Marea), el organismo de Naciones Unidas reconoce estar «preocupado» por la situación del Parque Natural.

El Comité encargado examinará su estado de conservación en la reunión de septiembre. Avisan de que se «podrá tomar cualquier decisión necesaria, incluida la posibilidad de inscribir el sitio en la lista del Patrimonio Mundial en peligro».

por Eduardo Robaina

 

Jueves, 20 de abril de 2023. El plan iniciado la semana pasada por PP y VOX en Andalucía para legalizar cultivos de regadío en la corona norte del Parque Nacional de Doñana tampoco agrada a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El organismo ha reconocido a Climática (lamarea.com) estar «preocupada» por la nueva proposición de ley que pretenden aprobar la derecha y la extrema derecha en el Parlamento de Andalucía por vía de urgencia.

El Parque Nacional de Doñana fue declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en 1994. Logró tal distinción al considerarse «un ejemplo excepcional de gran humedal mediterráneo donde conviven diversos ecosistemas que dan cobijo a una variada fauna». Ahora, esa definición y reconocimiento están en peligro debido al estado actual del ecosistema.

La extracción de agua (legal e ilegal), la sequía y las altas temperaturas (estos dos eventos agravados por el cambio climático), el funcionamiento de un campo de golf y la urbanización de Matalascañas, entre otros factores humanos, han provocado que el 59% de las lagunas de mayor tamaño de Doñana no se hayan inundado al menos desde 2013, tal y como constata un estudio reciente publicado en la revista científica Science of The Total Environment. Esta misma investigación destaca que el 80% de estas lagunas se secó antes de lo esperado y que el 84% tuvo un área de inundación menor de lo que se había previsto.

Desde la Unesco, consciente de la delicada situación del mayor humedal de Europa y la mayor reserva ecológica del continente, explican a Climática que durante la próxima reunión del Comité del Patrimonio Mundial –que se celebrará en septiembre en Arabia Saudí– «se examinará el estado de conservación del sitio». En este encuentro, reconocen, «el Comité podrá tomar cualquier decisión necesaria, incluida la posibilidad de inscribir el sitio en la lista del Patrimonio Mundial en peligro».

De producirse la entrada de Doñana en la lista sensible del organismo de la ONU se convertiría en el primer Patrimonio Mundial de España y en el quinto de Europa en hacerlo. A día de hoy, de los 1.157 sitios y bienes que gozan de este sello, tan solo 55 se consideran en peligro.

Formar parte de lista del Patrimonio Mundial en peligro va más allá de un simple gesto simbólico. El objetivo es reunir el apoyo internacional para ayudar al Estado correspondiente «a abordar eficazmente los desafíos a los que se enfrenta el bien, colaborando con el Centro del Patrimonio Mundial y los Organismos Consultivos en la elaboración de un programa de medidas correctivas para alcanzar el estado de conservación deseado», según refleja la Unesco en su documento de directrices. Asimismo, la inscripción de un sitio en la lista permite al Comité del Patrimonio Mundial asignar asistencia inmediata del Fondo del Patrimonio Mundial.

A causa de su estado actual, Doñana podría entrar en el listado de patrimonio en peligro puesto que entre los criterios que se aplican está el «deterioro severo de la belleza natural o el valor científico» por el «desarrollo industrial y agrícola», así como la «invasión humana en los límites que amenace la integridad del bien».

Además, la Unesco avisa de que si un lugar pierde las características que determinaron su inscripción en la Lista del Patrimonio Mundial, el Comité del Patrimonio Mundial puede aprobar su eliminación tanto de la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro como de la Lista del Patrimonio Mundial. Hasta la fecha, esta medida se ha adoptado en solo tres ocasiones, la última de ellas en 2021, cuando se excluyó a la Ciudad Marítima Mercantil de Liverpool debido a su remodelación.

30 años de advertencias sobre Doñana

Los avisos sobre el estado precario del ecosistema andaluz se llevan repitiendo desde el mismo momento en que Doñana fue declarada Patrimonio Mundial, en 1994. Ya entonces, la Unesco alertó a las autoridades españolas «sobre las continuas amenazas a la integridad del lugar derivadas de proyectos hidrológicos».

En las últimas tres décadas, la Unesco ha emitido 15 informes sobre el estado de conservación del Parque Nacional de Doñana. En el último, realizado en 2021, instó a ejecutar el plan que preveía el «cierre de todos los pozos ilegales», señala un portavoz del Comité del Patrimonio Mundial a Climática.

Casi todas las amenazas detectadas en el último informe del organismo internacional tienen que ver con el agua, principalmente con ​​el «uso insostenible del agua con impacto en el acuífero de Doñana». Asimismo, la Unesco señala como otros peligros para el lugar la reapertura de la mina de Aznalcóllar (que en 1998 provocó un desastre ecológico cuyo juicio se prevé para este año) y los proyectos relacionados con gas y petróleo cercanos al parque.

Actualmente, la proposición de ley que pretenden aprobar antes de verano el PP y VOX cuenta con el rechazo del Gobierno central; la Comisión Europea (que ha emitido varios avisos en los últimos años y meses); el director del Consejo de Participación de Doñana, Miguel Delibes; la Estación Biológica de Doñana-CSIC; organizaciones ecologistas; y la comunidad científica nacional e internacional.

La UNESCO se suma también a este rechazo, e insiste en que «la creciente desecación» de las masas de agua «está afectando directamente a las poblaciones de aves acuáticas» y «pone en grave riesgo la excepcional biodiversidad del Parque Natural de Doñana». Aun así, aseguran que seguirán trabajando con el Estado español «para garantizar la protección del valor universal del lugar».

Contenido bajo Licencia Creative Commons

<strong>¿Puede el Parque Nacional de Doñana perder el estatus de Patrimonio de la Humanidad otorgado por la UNESCO?</strong>

El principal desafío para la supervivencia de Doñana es la gestión del agua y la reducción de la presión humana en la zona. La posible inclusión del Parque Natural en la lista de Patrimonio de la Humanidad en situación de peligro podría suponer el paso previo a la pérdida de ese reconocimiento por parte de la UNESCO, una decisión plausible si la situación empeora significativamente y se incumplen los objetivos de conservación. No obstante, esta es una medida extrema que la organización mundial de Naciones Unidas solo ha llevado a efecto menos de una decena de veces desde  que comenzó el programa de espacios "Patrimonio de la Humanidad" en 1978.

Por ejemplo, en 2007, la UNESCO retiró el título de Patrimonio de la Humanidad a la Reserva Belovezhskaya Pushcha en Bielorrusia debido a la tala excesiva de árboles y la degradación del bosque. También han perdido su estatus el Santuario de Oryx de Omán (2007), el Valle del Elba en Dresde, Alemania (2009), el Valle de Katmandú en Nepal (2003), la Selva de Omán (2007) y, más recientemente, la Ciudad Vieja de Djenne en Mali (2016).

Según la UNESCO, en la actualidad hay 53 sitios declarados Patrimonio de la Humanidad que se consideran "en peligro". Estos sitios son aquellos que enfrentan amenazas como la guerra, el cambio climático, el turismo masivo, la urbanización y la explotación de recursos naturales, entre otros factores. Un ejemplo de Patrimonio de la Humanidad en Peligro debido a la disminución en la calidad del agua y la degradación de los humedales, situación análoga a la del parque de Doñana, es el Parque Nacional de los Everglades en Florida (Estados Unidos).

¿Podría el Parque Natural de Doñana dejar de ser Patrimonio de la Humanidad?

La pérdida de la consideración como Patrimonio de la Humanidad puede tener consecuencias negativas significativas para un sitio en términos de su conservación, protección y turismo. Por un lado, la designación como Patrimonio de la Humanidad a menudo lleva a un impulso en la inversión pública y privada en la conservación y restauración del sitio, lo que puede ayudar a mantener la integridad y autenticidad del mismo. Si un sitio pierde su estatus, es posible que los recursos financieros y de otro tipo destinados a la conservación se reduzcan, lo que podría tener un impacto negativo en su mantenimiento y preservación.

Además, la designación como Patrimonio de la Humanidad a menudo conlleva un aumento en el turismo, lo que puede generar ingresos económicos significativos para las comunidades locales y para el país en general. Si un sitio pierde su estatus, es posible que el turismo se reduzca, lo que podría tener un impacto negativo en la economía local y en la preservación del sitio.

También es importante tener en cuenta que la pérdida del estatus de Patrimonio de la Humanidad puede tener un impacto negativo en la identidad y el orgullo de las comunidades locales, que pueden considerar el sitio como un elemento importante de su patrimonio cultural y nacional

El Parque Natural de Doñana fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994 debido a su importancia ecológica y su valor como hábitat para una gran variedad de especies animales y vegetales, muchas de ellas en peligro de extinción. Sin embargo, en los últimos años se han evidenciado una serie de amenazas para la conservación del parque, incluyendo la extracción de agua ilegal, la contaminación, la urbanización y el cambio climático.

A pesar de estas amenazas, actualmente el Parque Natural de Doñana sigue siendo Patrimonio de la Humanidad y la UNESCO ha expresado su preocupación por la conservación de este sitio. La organización ha instado a las autoridades españolas a tomar medidas para proteger el parque y evitar su deterioro.

En cualquier caso, la decisión sobre si un sitio debe ser retirado del listado de Patrimonio de la Humanidad es tomada por el Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO, después de una evaluación detallada y la consulta con las autoridades locales y otros expertos. Si se determina que un sitio ha perdido su valor universal excepcional o que su integridad se ha visto comprometida, el Comité podría considerar la retirada del estatus de Patrimonio de la Humanidad. Sin embargo, es importante señalar que la decisión de retirar un sitio del listado de Patrimonio de la Humanidad es una medida extrema y se toma solo después de un proceso riguroso y exhaustivo de evaluación.

Sea el primero en desahogarse, comentando

Deje una respuesta

Tu dirección de correo no será publicada.


*


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.