Definitivamente, Hueva se ha convertido en la única provincia española para la que la red de ferrocarriles del Estado, en manos del Gobierno del PP, no contempla la llegada del tren de Alta Velocidad (AVE).
Tras varios días de polémica, en los que la Subdelegada del Gobierno en Huelva, Asunción Grávalos seguía hablando de “alta velocidad” para Huelva, y hasta llegó a acusar de “mentir” y “confundir a la ciudadanía” al Alcalde Gabriel Cruz y al presidente de la Diputación, Ignacio Caraballo, el Delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha reconocido implícitamente este jueves que el AVE no llegará a Huelva.
La fórmula para hacerlo ha sido desviar la atención cargando contra quienes critican la política del Gobierno -de los que ha dicho que es gente que “sólo vive de la confrontación que tiene poco que ofrecer»- y centrando la atención en que el Ministerio de Fomento ya habría demostrado su compromiso con el ferrocarril en Huelva “con la nueva estación y los arreglos de la vía», lo que para el Delegado del Gobierno en Andalucía vendría a ser más que suficiente para esta provincia.
“Lo importante es cómo reducir los tiempos y la fluidez de los trenes”, ha asegurado Sanz en el transcurso de una rueda de prensa en la que ha anunciado anunciar una inversión extraordinaria para acondicionar las playas de cara al verano, admitiendo así que no habrá ancho de vía europeo para Huelva, lo que supone que los trenes AVE no podrán circular entre la capital onubense y el resto de España.
Aún así, Sanz se ha referido al “compromiso” del Ministerio de Fomento con la provincia de Huelva, y ha calificado de actitud de “confrontación” las quejas de Gabriel Cruz y de Ignacio Caraballo. Sanz ha acusado a ambos de estar «más pendientes de confrontarse con el gobierno central que de buscar soluciones y resolver los problemas».
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