La llegada del coronavirus ha puesto a prueba a todos los países del globo y, por tanto, también a sus dirigentes políticos. Es una nueva realidad ante la que nadie estaba preparado, sin embargo, ha puesto de manifiesto que los países gobernados por mujeres son aquellos que mejor gestionan esta situación sin precedentes.
Avivah Wittenberg-Cox, directora de una consultora de igualdad de género, publicó un artículo en la revista norteamericana Forbes, donde colabora, en la que afirma que si buscamos «ejemplos de liderazgo verdadero de una crisis», solo tenemos que poner la mirada en territorios como Taiwán, Nueva Zelanda, Islandia o Alemania, entre otros.
Estos países parecen tener bajo control la pandemia, y Wittenberg-Cox sabe por qué: «¿Qué tienen en común los países con las mejores respuestas de coronavirus? Mujeres líderes«.
VERACIDAD
Para hacer esta valoración en Forbes, la colaboradora se ha basado en los datos de la Universidad John Hopkins, que muestran que 7 países han registrado una menor tasa de mortalidad y contagios, en proporción con sus países vecinos.
La colaboradora cita entre las líderes a la canciller alemana, Angela Merkel, que, como escribe, desde el primer momento le otorgó la gravedad correspondiente a la situación y empezó a hacer pruebas de inmediato a los ciudadanos. Los expertos consideran que esta última medida es la que ha determinado la desaceleración de la expansión del brote de la enfermedad en el país.
INMEDIATEZ
Aparte de la veracidad, Wittenberg también ha tenido en cuenta la forma de actuar de las dirigentes a la hora de la toma de decisiones ante esta crisis del coronavirus. Una de las más inmediatas, asegura, fue la de Tsai Ing-wen en Taiwán, que impulsó 124 medidas desde el comienzo, para evitar la propagación de la enfermedad. Quizás, esta sea una de las razones por las que la isla asiática solo ha registrado 6 fallecidos por coronavirus.
A su vez, destaca el papel de la primera ministra neozelandesa, Jacinda Andern, que cerró sus fronteras de manera precoz e impuso el autoaislamiento a las personas que llegaban al país desde el exterior.
CIENCIA Y TECNOLOGÍA, PRINCIPALES ALIADAS
En su artículo, también pone en valor el uso de la tecnología por parte de estas lideresas. Es el caso de la primera ministra de Islandia, Katrín Jakobsdóttir, que ofreció a los ciudadanos test gratuitos, lo que permite determinar una cifra clara de mortalidad y contagios por el virus en el país.
La primera ministra finlandesa, Sanna Marin, ha demostrado ser una política millenial –no en vano es la jefa de Estado más joven del mundo- al hacer uso de las redes sociales y de los influencers, como método de propagación de las medidas para prevenir el contagio y de información científica sobre esta nueva pandemia.
SENSIBILIDAD
Una comparecencia dedicada exclusivamente a los niños, en la que solo ellos tenían derecho a hacer preguntas. Esta es una de las respuestas que ha dado la primera ministra noruega, Erna Solberg, en medio de estas crisis. Ella respondió a las preguntas más frecuentes de los más pequeños: «¿qué pasaría con la fiesta de cumpleaños que llevaban preparando?», «¿hasta cuándo tendrán que estar en casa con papá y mamá sin poder ver a los abuelos?», «¿el virus podría afectar a las mascotas?».
Dinamarca siguió el ejemplo de su país vecino y la primera ministra socialdemócrata Mette Frederiksen, también respondió las preguntas de los niños en una pequeña comparecencia. Además, el país es el primero de la Unión Europea que ya ha abierto escuelas y guarderías, aunque de manera «controlada» y «prudente».
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