Muchos me preguntan estos días telematicamente que como se van a tomar las medidas para una economía paralizada casi en su totalidad. Muchos se asustan cuando les digo que ahora podemos estar en nuestro país en un número de parados cercano a los 10 millones por la evidencia del confinamiento, todos quieren algún tipo de ayuda y sustento y eso que aún la preocupación máxima está en superar el techo de la pandemia, el PIB está congelado en cero absoluto, que empezará a ser negativo según se inicie un mínimo de actividad.
¿Qué es lo que hay que hacer en un momento así? nadie lo sabe porque es la primera vez que el mundo se para totalmente…solo es comparable a la Segunda Guerra Mundial, una Europa destrozada y unos EEUU engordados por salir indemnes de destrozo alguno en territorio nacional. Otra situación parecida podría ser muy de lejos, la crisis de 2008 de Lehman Brothers, crisis financiera mundial, crisis de la deuda o crisis Zapatero, según parte de nuestra derecha. En aquella ocasión se optó en un primer momento por las políticas keynesianas de expansión del gasto para recuperar el consumo y, en todo el mundo se aplicaron planes de estímulo para la reactivación económica y para la creación de empleo. Fue en principio bien pero, los cambios estratégicos de el núcleo duro de la Unión Europa viraron hacia todo lo contrario y apostaron por las reducciones del déficit frente a todo.
Todo apunta a que el principal combate de la tensión del Eurogrupo será la emisión de los coronabonos, un título de deuda común al que se oponen de momento Países Bajos y Alemania. Sus principales artífices son los países del sur, que los ven como una medida de apoyo a la financiación de los estímulos multimillonarios que las capitales se están viendo obligadas a lanzar en los últimos días para evitar el colapso. La medida debe ser tomada con total convencimiento y el no hacerlo podría llevar a Europa a lo que todos conocemos ya: las víctimas rescatadas de la quiebra fueron España, Portugal, Irlanda, Grecia y Chipre.
Se trataría de una emisión de bonos creada con el objetivo concreto de sobrepasar esta crisis económica. En principio, sería algo limitado en el tiempo. Es muy posible que se tratara incluso de una emisión única. Los Gobiernos nacionales no dejarían de emitir su propia deuda y podrían financiarse paralelamente. Se trataría de títulos de deuda común europea. Algo similar a los bonos del tesoro que emite el Estado para financiarse, pero respaldados no solo por un país sino por los 19 de la zona euro de manera solidaria. La idea es evitar que países como Grecia, Italia, o España, con una cifra de deuda ya alta, vuelvan a verse en la necesidad de pagar cantidades astronómicas para poder financiarse si los mercados empiezan a desconfiar de ellos como pasó en la Gran Recesión. Como Países Bajos o Alemania, países más solventes (y algo menos afectados de momento), estarían en la misma bolsa, los costes de emisión de deuda para los países más afectados serían más bajos. Los más expuestos se aprovecharían de la confianza que los mercados tienen en Berlín.
Una de las principales razones para emitir estos coronabonos es que el Banco Central Europeo tendría más deuda que comprar. El BCE anunció la semana pasada un programa de estímulo económico evaluado en 750.000 millones de euros y se añade a años de compra de deuda para animar la economía. El BCE no puede tener en cartera más del 33% de las emisiones de deuda de un país miembro concreto, pero está cerca de llegar a ese límite en el caso de países como Alemania, uno que menos paga por financiarse (en algunos casos incluso gana dinero al emitir deuda). Reuters apunta que a qué Alemania está cerca de ese límite y pronto como en junio y no a más tarde de septiembre. Al ser una institución europea y no un país quien emitiría esta deuda, no contaría para el límite del BCE. El banco se enfrenta a un dilema en la actualidad entre aumentar esa barrera o comprar bonos de otros países, lo que va en contra de sus reglas que dictan que tiene que adquirir deuda de manera proporcional al tamaño de los socios del euro, tal y como prosigue Reuters. Es decir, Alemania primero, y Francia después. En ese orden (sic…).
En los EEUU otra medida que alguno no me ha entendido nunca; el gobierno federal se plantea repartir dinero entre los ciudadanos. El Senado de Estados Unidos ha aprobado este miércoles el plan de estímulos económicos de dos billones de dólares (1,84 billones de euros) para hacer frente a la pandemia del coronavirus, donde se han confirmado ya más de 65.700 casos y el número de muertos ha alcanzado el millar. El plan, el mayor programa de estímulos económicos de la historia de Estados Unidos, ha sido aprobado con 96 votos a favor y ninguno en contra, según ha recogido la prensa estadounidense.
El líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, ha señalado también en la citada red social que la Cámara Alta ha pasado «de uno de los períodos más divididos en la memoria reciente a aprobar el paquete de rescate más grande en la historia estadounidense». «Y lo hemos aprobado por unanimidad», ha agregado. Por su parte, el líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, ha trasladado que «han luchado por el sistema de salud estadounidense, por salvar trabajos, millones de pequeños negocios, millones de trabajos en la aviación y más». “Hemos luchado para garantizar que los estadounidenses que han perdido sus empleos puedan pagar alquileres, hipotecas y alimentos por la mayor expansión de la prestación de desempleo en décadas». “Hemos luchado para garantizar que los estadounidenses que han perdido sus empleos puedan pagar alquileres, hipotecas y alimentos por la mayor expansión de la prestación de desempleo en décadas». Ahora, corresponde a la Cámara de Representantes celebrar una votación para aprobar o no la medida. Según ha anunciado el líder del Congreso, Steny Hoyer, tendrá lugar este viernes.
El paquete incluye ayudas para las pymes, para sectores en apuros, como las aerolíneas, una ampliación de la cobertura por desempleo y el pago directo de dinero en efectivo a las familias estadounidenses. El importe del paquete de estímulo representa la movilización de más de del doble de los 800.000 millones de dólares (740.158 millones de euros) del paquete de ayudas aprobado por la Administración del expresidente estadounidense Barack Obama para hacer frente a la crisis financiera de 2008 y podría engordar a más del doble el déficit estadounidense, que ronda actualmente el billón de dólares.
Estados Unidos amenaza con convertirse en el epicentro de la emergencia sanitaria derivada del Covid-19. La pandemia de coronavirus ha dejado a nivel global más de 30.000 muertos y la cifra de afectados sobrepasa los 500.000…..pero recuerden que en cuanto se controlen las cifras y los contagios, la población querrá dinero para salir del parón más grande de la historia del mundo contemporáneo.
Francisco Villanueva Navas, analista financiero de La Mar de Onuba, es economista y periodista.
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