por Jesús Cabaleiro Larrán.
Argelia y Mauritana abrieron el pasado 20 de agosto el primer paso fronterizo terrestre que unirá ambos países. Se inicia al sur de Tinduf en Argelia y se pretende siga ruta hasta el interior de Mauritania, en concreto hasta la ciudad de Zouerat.
El ministro de Interior de Argelia, Noureddine Bedoui y su homólogo mauritano, Ahmedou Ould Abdallah, junto a otras autoridades, asistieron a la ceremonia de inauguración.
El objetivo es aumentar el comercio y facilitar los viajes entre ambas naciones, en el marco de una política de estrechar lazos económicos y de amistad, garantizando el movimiento de mercancías y bienes. También servirá para fortalecer el control de seguridad de la frontera entre las dos naciones africanas.
Con este paso se abre una nueva época de integración entre los países norteafricanos con los del Sahel, según informó el canal de Televisión de Argelia. La frontera se extiende por 460 kilómetros de desierto y en la parte mauritana es una zona sensible declarada como área militar por lo que no se permite el acceso a civiles.
El Alto Comité Mixto argelino-mauritano autorizó la construcción del puesto fronterizo en su última reunión en diciembre de 2017 en Argel.
El punto de partida de este enlace fue elegido a 75 kilómetros al sur de la ciudad argelina de Tinduf –lugar de los campamentos de refugiados saharauis que saldrán también beneficiados para acceder a la zona que controlan en el Sahara-.
El puesto fronterizo denominado con el nombre del militante argelino Mustafa Ben Boulied, conducirá a través de una autovía hasta la mauritana de Zouerat, localidad de 40 000 habitantes que tiene la única vía férrea existente, construida por los colonizadores franceses en 1963, que la une con Nuadibú llamada ‘línea de los trenes del desierto’.
Desde Zouerat el enlace recorrerá 632 kilómetros hasta la capital de Mauritania, Nuackchot.
Algunos observadores creen que este puesto fronterizo aislará económicamente las exportaciones marroquíes que pasan a través del muro de Sahara hacia Mauritania y países del Sahel y castigará la economía de Marruecos en su acceso al mercado africano, según alertan algunas fuentes. Argelia exportó en 2016 por un total de 51 millones de dólares (43,8 millones de euros) hacia el África subsahariana.
De hecho, la prensa en Marruecos ha criticado esta apertura señalando por un lado que hará la competencia al paso de Guerguerat, que servirá para “los tráficos de todo tipo del Polisario” además de no contar con la Unión del Magreb Árabe (UMA).